Combinar la harina, la avena molida, el azúcar y la 1/2 cucharadita de sal en un tazón mediano. Incorporar la mantequilla con un cuchillo de repostería o con dos cuchillos hasta que la mezcla se desmorone. Espolvorear con agua; mezclar con un tenedor hasta que la mezcla se mantenga unida.

Formar una bola con la masa; colocar sobre una hoja de papel encerado ligeramente enharinada. Tapar con una hoja adicional de papel encerado. Estirar la masa hasta que tenga un grosor de 1/8 de pulgada. Retirar la hoja superior de papel encerado e invertir la masa en un molde para tarta de 9 pulgadas (volumen de 4 tazas). Retirar lentamente el papel encerado. Recortar el exceso de corteza. Doblar el borde hacia abajo; rizar como deseas.

Mezclar 3/4 de taza de azúcar, la canela, 1/2 cucharadita de sal restante, el jengibre y el clavo de olor en un tazón pequeño. Batir los huevos en un tazón grande. Agregar la calabaza y la mezcla de azúcar y especias. Poco a poco agregar la leche evaporada.

Verter en la corteza.

Hornear en un horno precalentado a 425º F durante 15 minutos. Reducir la temperatura a 350 ° F; hornear por 40 a 50 minutos o hasta que al insertar un cuchillo cerca del centro, éste salga limpio. Dejar enfriar sobre una rejilla durante 2 horas. Servir inmediatamente o refrigerar. Decorar con crema batida o cobertura antes de servir.