Precalentar el horno a 350º F. Forrar con forros de papel de aluminio 16 moldes para cupcakes (de 2 1/2 pulgada) y ponerlos sobre una bandeja para hornear con lados. Rociar cada molde con spray antiadherente.

Combinar el azúcar, la maicena, la canela, el jengibre y la sal en un tazón pequeño. Batir las claras de huevo en un tazón grande. Agregar la calabaza y la mezcla de azúcar. Poco a poco agregar la leche evaporada. Verter 1/4 a 1/3 taza de la mezcla en cada forro preparado.

Hornear durante 25 a 28 minutos o hasta que al insertar un cuchillo cerca del centro, éste salga limpio. Dejar enfriar en una bandeja para hornear durante 20 minutos. Refrigerar por al menos 1 hora. Decorar cada uno con crema batida y migas de galleta de jengibre.